Por Andrea Segovia

El Sub-Consejo Tsimane del Sector Yacuma y la Fundación TIERRA, una organización sin fines de lucro dedicada a la “investigación-acción” en temas agrarios y rurales, lanzaron recientemente el video  “ TSIMANES. El despojo de un pueblo”, el cual muestra cómo las familias de este pueblo indígena atraviesan una crisis en su territorio y la incertidumbre que tienen sobre su futuro.

El video da a conocer que, además, de los problemas que este pueblo afronta para su supervivencia, se suma el avasallamiento, discriminación y despojo. Desde hace diez años, alrededor de dos centenares de familias organizadas en 13 comunidades y que pertenecen al Sub-Consejo Tsimane del Sector Yacuma fueron sorprendidos con la invasión de su territorio. Esta irrupción está acompañada por el Instituto Nacional de Reforma Agraria (INRA) y por los denominados ‘interculturales’, afirma el audiovisual, que en su mayoría son campesinos de tierras altas.

Con una existencia precolonial, el pueblo indígena Tsimane se encuentra disperso en tierras bajas que inician en las últimas estribaciones de Los Andes hasta los márgenes de las sabanas, en la Amazonía boliviana; abarca las provincias Moxos, Ballivián y Yacuma del departamento del Beni y las provincias de Sud Yungas e Ixiamas en el departamento de La Paz.

El lenguaje tsimane —que es utilizado entre sus pobladores— poco a poco está siendo aislado y existe sobre él una amenaza de desaparecer, pese a tener parentesco lingüístico con el de sus vecinos mosetenes.

Armando Fernández de la comunidad de Río Grande sostiene que sus padres y sus abuelos murieron en esa comunidad, que antes de que otra gente llegue, tenían sendas, pero después de su llegada, abrieron carreteras y después de eso, fueron asentándose y luego los fueron botando.

Por su parte, Lucio Fernández, también habitante de la comunidad Río Grande señala que antes existían muchos animales, en especial chanchos troperos y ahora ya no hay nada a causa de grupos de interculturales que se asentaron en el lugar. “Qué cosa voy a cazar…, ahora ya no hay nada”, mencionó en el video.

“Hoy en día los interculturales hacen espantar a los animales tumbando troncos, los animales se van alejando y se nos hace muy lejos ir a cazar”, asevera Gumercindo Miro, habitante de la comunidad de Palmira.

Territorio ancestral en riesgo de desaparecer

El video señala que estas tierras donde viven los indígenas del sector Yacuma (Beni) fueron declaradas como, tierras fiscales, porque cuando vino el INRA a realizar el saneamiento, pues simplemente no los vieron. En este sentido, vinieron otros grupos a buscar tierra y se asentaron en sus territorios, los denominados “interculturales”, con títulos otorgados por el INRA.

“Nosotros somos del lugar, no venimos de otro pueblo ni de otro lado. Hay muchas evidencias, quemaron nuestras casas”. “No nos defendimos ni con documento, porque no sabíamos escribir, ni hacer demandas, ni otras cosas”, manifiesta Gabriel Merena, quien fue desalojado de la comunidad de San Gabriel.

Walter Sánchez, Corregidor de Flor de Mapajo, sostuvo que el INRA se comprometió a reubicarlos, pero hasta ahora siguen esperando, ya pasaron dos años y aun están viviendo sin tierra. “No podemos sembrar nuestros productos, ahora estamos viviendo como trabajadores, como peones, en las que fueron nuestras propias tierras”.

Por su parte, Alcide Vadillo, coordinador de Fundación Tierra Regional Oriente, manifestó en el video que un pueblo que no tiene territorio esta condenado a desaparecer. “Si el Estado no les reconoce sus tierras, si el Estado no quiere reconocer sus autoridades, su existencia como comunidades, su idioma para acceder a la justicia, todo este conjunto de elementos es una política de discriminación. Como implementación, lo que nos va a generar, es el etnocidio de este pueblo”, enfatizó.

Imagen principal: captura de pantalla de video

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